PADRE

 Solo sabías vivir deprisa,
 como si supieras de sobra
 con aquella media sonrisa
 que no acabarías tu obra.

 Quisiste volar tan alto
 que a veces lo conseguías
 sin pensar en el fracaso,
 aquello no lo entendías.

 Amigo de muchos
 y enemigo de unos cuantos
 en cosas de corazón no había mitad ni cuarto,
 o todo era para tí o no querías ni un tanto.

 Fuiste tan de la calle
 que no querías tejado
 ahora no pierdas detalle
 del legado que has dejado.

 Café, whisky y puro,
 no era lo tuyo el "champán",
 sin embargo Don Julián
 era un regalo seguro.

 A veces era muy triste
 siempre estábamos como perros,
 pero un día te me fuiste
 y ahora Padre ,
 te echo mucho de menos.