LA BUENA FORTUNA

  Trabajo, trabajo, trabajo , debe ser la palabra más pronunciada en estos años de crisis , no hay nada que la gente desee más que un trabajo , bueno sí hay una cosa , la suerte , para ser más explícito la buena suerte porque vaya una hostia si encima fuera la mala . Pues sí ,la suerte que siempre creemos esquiva pero que a la que al final recurrimos sobre todo cuando algo sale mal , tiene narices que cuando algo sale bien sólo sea mérito propio, ¡ humanos!.

  ¿ Por donde andaba yo ? , sí la suerte , es que me ha entrado una rusa muy mona y me he bifurcado , a lo que estábamos , en la continua búsqueda de discutir sobre lo que tratamos como suerte o trabajo siempre nos encontramos con nuestro ego , nuestra propia satisfacción de no repartir méritos ni medallas , si es que hasta si nos toca algo en la lotería o en los ciegos decimos que el número nos daba buena espina o sabíamos que nos iba a tocar ¡¡¡si es puro azar válgame los payos!!! , pues ni con esas , somos de lo que no hay , que gana el Madrid y pierde el Barça ya te lo dije yo , que llueve cuando vas a la playa con un amigo pues este es el gafe porque siempre que viene llueve , que nos invitan a copas por casualidad pues será porque soy la hostia , que no apruebas un examen porque sacaste un 4,9 y no estudiaste pues mala suerte y así toda la vida . Pues para que no influya tanto la suerte quizás habría que empezar a pensar que la suerte como tal no es más que cosas azarosas sujetas a un libre albedrío que escapa a nuestro control y al de cualquiera, que todo lo que uno tiene,recibe o demanda es fruto de lo que se trabaja ,se busca o se quiere y sólo unos pocos nacieron con un jardín en el "hojaldre" , incluso alguno posee auténticos Amazonas (¡¡ojú que asco!!).

  Llevo años pensando que cuando tendré la buena fortuna de  no volver a pegar ni chapa , soñando despierto que algún día vendrá el genio de la lámpara y arreglará lo que yo solito he roto , pues en esas sigo y por más que miro a mi alrededor ni veo genios , ni lámparas ,ni hadas, ni elfos, ni al calvo de la loteria , ni a la Caballé con los ojos desorbitados ni tan siquiera a Campanilla que sería la que más ilusión me haría , como remedio a esto lo que me queda es seguir viniendo al tajo todas las mañanas , traerme conmigo la mejor de las sonrisas , lamer algún culo para que la gente me siga comprando y guardarme el orgullo junto con la soberbia, es decir lo más lejos posible de donde este yo.

 Los que nos precedieron hicieron un mundo mejor a base de esfuerzo ,ilusión,mucha dedicación y pocas concesiones a la suerte, de echo los suertudos por norma general no aportan nada porque se dedican a disfrutar de su idem, en cualquier caso nos quedan pocas opciones y si queremos prosperar en este mundo de paso lo mejor será que cada perro se lama su pijo y nos pongamos en marcha lo antes posible porque en el único sitio donde la suerte antecede al trabajo es en el diccionario.